Seguimos en Malta... esta escala está resultando muy provechosa para el velero -hemos reemprendido nuestras tareas de bricolage, restauración, recuperación- que por fin empieza a parecer una casa y no un taller, pero no estamos teniendo demasiado tiempo para hacer turismo.
Eso no significa que estemos todo el días como tortuguitas dentro de nuestro caparazón, ni mucho menos: sin salir de los pantalanes, la vida social es muy activa.
A diferencia del puerto de Monastir -donde también había mucha gente pasando el invierno a bordo de los barcos- aquí los "live a board" tienen un programa de actividades bien organizado. Nos han comentado que lo mismo pasa en algunos puertos de Turquía, es un dato a tener en cuenta a la hora de elegir donde invernar, porque la cosa tiene su gracia.
Cada día a las 8'30h de la mañana, en el canal 77 de VHF Tom, David, Daphne... hacen un resumen de las actividades culturales de la isla (conciertos, exposiciones), dan el parte del tiempo, anuncian las actividades propias (excursiones, intercambio de libros, encuentros en algún bar cercano, barbacoas...) y "otras cuestiones" que van desde un "regalo cien metros de amarre que me sobran" hasta un "tengo un problema con mi piloto automático, ¿alguien me puede echar una mano?"
Nosotros hemos participado en varias de estas propuestas. Las quedadas en un bar son una buena excusa para conocer a otros navegantes y juntos discutir rutas, derroteros, puertos (siempre encuentras a alguien que acaba de venir a donde tú vas, o que va al sitio del que tú estás llegando) e intercambiar experiencias.
El pasado jueves, yo asistí a una clase... de bailes de salsa ¡impartida -en inglés- por una australiana!!! era divertidísimo (no hay que olvidar que mi inglés es muy de principiante) aprender una música que me resulta tan próxima al grito de "to move your hands like dancing flamingo!" o "now like a Ricky Martin"... y meneito para aquí meneito para allá a la voz de: "the right leg forward, the left leg back". No hay fotos que lo certifiquen -afortunadamente- pero ahí estuve!!
También tuvimos una barbacoa. Fue hace una semana y teniendo en cuenta que está haciendo un tiempo terrible, fue una suerte disfrutar de un maravilloso día soleado.
En un área que hay al final de los pantalanes, se instalaron varias barbacoas traídas de otros tantos barcos y cada quien se traía su propia comida. Nosotros -aun novatos en las costumbres europeas en cuanto a horarios comerciales- con la nevera vacía nos fuimos al Lidl el sábado a eso de las 7 de la tarde. CERRADO. Todo cierra a las 7 de la tarde. Buscamos un par de supermercados más y CERRADOS!!! Finalmente dimos con una tiendita de esas que parece que no cierran nunca y pudimos comprar unas hamburguesas congeladas (que resultaron ser de importación... de Burgos para más señas, por cierto, hay cientos de productos españoles en las tiendas... pero eso es otra historia) y con un par de mazorcas de maíz que teníamos, apañamos la barbacoa.
Además cada cual aportaba algo para compartir. Junto a las muchas y diversas ensaladas lució con éxito nuestra tortilla de patatas!
Fue un día perfecto... desde el Alea -que está casi junto al muro en el que se celebraba el evento- la vista era así de animada
Nada mejor para estrechar lazos que un buen "filete con vistas"
Y desde luego, terminada la comida, repartidos los postres... llegó la hora de ir a los barcos para traer algo con lo que calentar el cuerpo y seguir con la charla hasta que el frío nos devolviera a bordo.
Lo mejor de la barbacoa fue que pudimos "romper el hielo" con mucha gente con la que nos habíamos cruzado en uno u otro momento pero con quienes no habíamos hablado.
Uno de los resultados es que nos hemos pasado la semana invitando y siendo invitados a cafés, tes, aperitivs, tapas, tartas...
Nuestros amigos Tom y Liz del Feel Free vinieron una noche para explicarnos sus lugares favoritos de Sicilia y Grecia (amarres, fondeos, tiendas, restaurantes) y preguntarnos otro tanto sobre Túnez hacia donde se dirigen. Regamos la conversación con un vinito y comimos unas tapas (aun me quedaba fuet , jamón y chorizo envasado al vacío) y la noche fue estupenda...
Al día siguiente, Tom me regaló un bonito ramo de flores silvestres (supongo que un efecto directo del pan con tomate y jamón, jeje)
Hoy vienen Göran y Aylin (sueco y turca) que nos invitaron el otro día a un cafecito; necesitaban información del puerto de Barcelona y les conseguimos el teléfono. He cocinado una tarta que tiene una pinta estupenda... si mañana no amanece otro ramo de flores en la puerta... es que el efecto del jamón serrano queda demostrado.
En resumen, que el cuarto de baño del Alea está terminado, el camarote de literas casi casi, el tanque de agua caliente instalado, los interiores de los armarios perfecto, o sea, que hemos trabajado bien y que tal vez no conozcamos demasiado Malta, pero en absoluto hemos perdido el tiempo!!
Un beso y hasta la próxima... delante de la pantalla o a bordo del Alea
3 comentarios:
Resulta genial leer vuestras experiencias en los puertos, me traen muchos recuerdos. Ahora, atado en Madrid, a cientos de kilómetros de cualquier puerto es una bocanada de aire de mar saber de vosotros.
Un fuerte abrazo.
P.D.: Nos encantaría poder estar unos días con vosotros navegando, pero ahora estoy en el paro y tengo que tener mucho cuidado con los gastos. Espero que pueda ser el año que viene.
Chicos ,
Que suerte poder leer acerca de ustedes y de los lugares. Lastima que estamos tan lejos fisicamente.
Son unos campeones!!!
Pao y Juanca
Os leo, Silvia... y disfruto con vuestros relatos. Os felicito por la conclusión de esas mejoras a bordo, pero unas fotillos estaría bien, no?
Un abrazo!!
Publicar un comentario