miércoles, 27 de enero de 2010

vivir en seco

Si todo va bien, este es el último post en seco de la temporada!

Ayer nos dijeron que el viernes nos ponen en el travelif, nos dejan colgados hasta el sábado para que tengamos tiempo de aplicar la patente a los lugares que ahora están inaccesibles bajo las patas de la cuna que nos sostiene y... al agua!

Y como os podéis imaginar, con la noticia han llegado las prisas: tenemos el suelo de nuestro camarote desmontado, lijado y a medio barnizar; queremos instalar la antena de BLU aunque de momento sólo nos sirva para recibir (especialmente para que yo pueda oír la radio... y para 1recibir partes meteorológicos) y tenemos que dar dos manos de patente al fondo previo lijado!

Y para acicalarlo todo... hace un frío que pela!!




Así que entre mano y mano de patente tenemos que esperar 24h y pintamos al medio día para que la temperatura sea un poquito más adecuada

Por suerte la calefacción que instaló Johan mientras yo acababa mi estancia en España funciona fenomenal y dentro la temperatura es ideal; en media horita pasamos de los 8 grados a los 16 (confiamos que cuando estemos en el agua el casco estará menos frío ya que el agua está ahora a unos 14 grados); cuando llegamos a los 20º nos damos por satisfechos y... a ver quien sale ahí a fuera a trabajar!




Pero bueno, hoy os quería contar cómo ha sido esto de estar en seco.

La mayor dificultad -para mí- es la de no poder utilizar el baño de abordo; es cierto que la marina tiene baños (nada que ver con los de las marinas de Monastir o Malta donde hay muchos barcos con gente pasando el invierno, no hay que olvidar que estamos en una marina seca y aquí sólo pasamos el invierno -o parte- cuatro despistados) pero en las duchas no hay calefacción -y la ventana está permanente e inevitablemente abierta- y cuando aprieta la necesidad a las 3 de la mañana y el bendito termómetro marca lo que marca...

Desde luego, es incómodo lo de subir y bajar al barco por una escalera de esas de gato...

Casi no tenemos vecinos y los que hay no son muy habladores.

El entorno no es el más bonito del mundo.

Peeeero: no estamos solos, tenemos luz, agua, hay baños y duchas -podría ser peor-, hay un par de tiendas náuticas -chiquitas- y podemos hacer la puesta a punto sin mayores problemas

Y un nuevo personaje ha entrado -de visita- en nuestra vida
Os presento a la Sra. Mercedes



Esta linda gatita -que por lo gordeta que está no pasa mucha necesidad- ronda por la marina y como un día se me ocurrió bajarle un poquito de jamón york, al siguiente las sobras de los raviolis... pues ahora se nos ha instalado en el barco vecino (que tiene la cubierta de madera y es más calentita) aunque cuando cociné lentejas no pudo resisitir acercarse hasta el mismisimo tambucho de entrada para pedir... porque pedir pide un rato!

¿qué porqué la he bautizado cómo sra. Mercedes? porque mi madre se llama Mercedes y adora los gatos, porque es guapetona como mi madre, y porque como mi madre siempre la tienes ahí dale que te pego: miau, miau -con todo el cariño del mundo, mami, que eres la mejor de entre las mejores y que pese a la rabia que te da que estemos por ahí dando vueltas ¡en velero! cada día lo llevas mejor-.


Pero hablando de problemas, no puedo olvidarme de la colada
¡qué sencillitas son algunas cosas cotidianas, hasta que dejan de serlo!
en el barco no tenemos lavadora pero a mi me encanta (lo digo de verdad, ME GUSTA) lavar a mano; no sé bien como explicarlo pero cuando estoy ahí con las manos metidas en el agua con jabón y dándole a la ropita -normalmente charlando a gritos con alguna vecina de pantalán o de fondeo que anda en las mismas faenas- siento que estoy haciendo algo natural, algo que forma parte de mi herencia genéntica... yo entiendo que haya a quien no le guste... pero a mí me gusta, bueno, me gusta casi siempre; porque aquí el agua está, pues eso, a 4º y así NO ME GUSTA.
Solución: lavandería
jaja, qué fácil sería si fuera fácil, pero aquí no hay ninguna lavandería
en resumen:
tengo montañas de ropa esperando mejores puertos
Johan está buscando lavadoras pequeñas y manuales, de esas de camping, en internet



qué tiempos aquellos en Malta, en Siricusa cuando hacía solecito y calor



Pero las cosas hay que tomarlas como vienen... y lo próximo que viene será la vuelta al viaje

El sábado al agua

La siguiente semana a NAVEGAR



Recordad que si os apetece ser parte de la aventura aquí os esperamos!

www.sailingalea.com



Esta semana hemos llegado a la visita número 40.000 en el blog
GRACIAS A TODOS LOS QUE LO HABÉIS HECHO POSIBLE
SIN VOSOTROS ESTE VIAJE NO SERÍA LO MISMO
NO HAY BARCO QUE SE PRECIE SIN UN POLIZÓN Y NUESTRAS BODEGAS ESTÁN LLENAS
OS QUEREMOS UN MONTÓN

Para celebrarlo nos hemos comido un croissant de chocolate cada uno!
Un atentado contra la dieta que intentamos seguir después de haber pasado unas semanas en casa de las respectivas mamás -Navidades incluidas- pero la ocasión lo merecía



Cuando lleguemos a las 50.000 nos vamos de cena!

jueves, 21 de enero de 2010

Navplio, Nauplio o Nafplion?


Seguimos en Kilada, con el barco en seco... pero con la promesa de que a final de mes podemos ir al agua. No nos aburrimos -eso es verdad- y mientras escribo esto el capi está lijando y barnizando los suelos de los camarotes (tarea que quedaba pendiente) y en cuanto acabe seguiré puliendo el inox de la cubierta. Pero en cuanto cae el sol y nos encerramos en nuestra casita/cascarón, nos ponemos a trazar las rutas que nos esperan, ver las millas que separan esta isla de aquella, a buscar cual es el mejor fondeo. Y pensando en el futuro siempre resurgen anécdotas del verano y así nos dimos cuenta que no os hemos contado nada de nuestro paso por Navplio (o Nauplio o Nafplion que lo hemos encontrado escrito de todas las maneras), una de las ciudades más bonitas que hemos conocido en esta zona!!



Navplio es una de las ciudades más alejadas de nuestro punto de partida que hemos visitado, a unas 24 millas al noroeste de Pto. Kelli; llegamos ahí tra parar una noche en Kaidari donde por fin estrenamos nuestro kaiac.



Y en estas aguas hemos tenido nuestras primeras -y únicas- capturas. No sabemos si será por que se trata de una zona en la que hay muchas piscifactorias hay más pescado en general pero los 9 pescaditos que nos hemos comido en estas semanas son de por aquí. Hemos visto que si se le pone dedicación al curri se pesca más (Joan ha sido el campeón) así que donde hemos pescado 9 tal vez podían haber caido algunos más, pero si los pescadores llegan a puerto sin apenas capturas, no está mal para unos novatos como nosotros.



Pero bueno, que me voy del tema. Que estábamos rumbo a Navplio! por cierto en un día tranquilo de esos en que las velas son un adorno y que el mar está como un plato




Es una ciudad grande -la capital de la prefactura de Argólida- y tiene 20.000 habitantes; nada que ver con los pueblitos por los que nos hemos movido, pero a pesar de todo es acogedora.

Como muchas ciudades, hay una parte vieja -callejuelas estrechas, muchas escaleras, bougambillas, bares. tabernas, restaurantes- y una parte nueva que tiene parques en los que es agradable pasear, comercios en los que llenar la despensa, semáforos (hace meses que no veíamos ninguno!) etc

Navplio fue una ciudad importante en la época de los venecianos -de entonces conserva dos castillos- y durante las guerras de la independencia griega, incluso fue capital de la Grecia moderna entre 1823 y 1834, o sea, que es una ciudad con mucha historia!

Se puede llegar fácilmente en tren o autobús desde Atenas (unas 2 horas y hay mucha frecuencia de paso) pero desde luego, no hay nada como llegar por mar y dejar que te reciba la isla que alberga una fortaleza que se utilizó como prisión.





Frente al paseo en el que se levanta el castillo se puede amarrar el barco con el sistema de ancla a proa y popa amarrada a tierra; si hay mucho espacio, se puede abarloar de costado.
Los servicios: no hay electricidad y puedes llenar los tanques de agua si tienes suerte de oir el coche del "waterman". El coste de amarrrarse es -para nuestra eslora- de 6 euros al día.




El enclave, maravilloso: estábamos a un paso de la zona de copas, con unas vistas imponentes... sin el ruido!




La ciudad vieja tiene calles por las que perderse sin prisa a la sombra de las bugambilias




Con restaurantes que las invaden




Tabernas en cada esquina en las que comer por buen precio o simplemente disfrutar de una cerveza o un café frappé



Calles que se pierden cuesta arriba y que esconden un montón de pensiones pequeñitas



Y presidiéndolo todo: el castillo. Y cuando digo "presiciéndolo" quiero decir que está ahí ARRIBA, muy alto ¿habrá ascensor? ¿algún medio de transporte?




Junto a Jordi y Pili decidimos que valía la pena visitarlo. A los pies de la montaña nos pareció que tampoco podía ser para tanto... personalmente cambié de opinión al llegar al escalón número 200 y sentí que me fallaban las fuerzas, y apenas había empezado a subir!!!
Los demás -Johan contando escalones, Jordi haciendo fotos, Pili sin perder la sonrisa- seguían la ascensión, de modo que no me quedó más remedio ¡a seguir subiendo!



Según el cómputo de Johan: 840 escalones, según la amable señorita que nos vendió la entrada: 910 escalones, según alguna guia que hemos leído -después- 857 escalones. En cualquier caso: muchos escalones




Las vistas -eso sí- valían la pena




y la visita al castillo -muy bien conservado- también




Bajar del castillo fue sencillo y nos regalamos una buena comida en una taberna (saganaki, ensaladita griega, ensalada de berenjenas, mousaka, souflaki) regada con una Mythos; lo malo llegó al día siguiente cuando no nos podíamos levantar de la cama de las agujetas!!!

Ahora estamos a penas a 20 km en coche de Navplio y sin embargo tenemos la sensación de estar ya muy lejos. Nuestra mirada ya está puesta en las Cicladas... ya falta menos


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Información para navegantes

- Se amarra por el sistema habitual en esta zona y el coste es de 6 euros para un 44 pies
- Se puede conseguir agua (10 euros llenar el tanque) pero no hay electricidad, hay servicio de gasoil con pequeñas cubas que pasan a diario.
- En el mismo paseo hay una caseta que alberga a la autoridad portuaria; normalmente no vienen al barco a cobrar ni a revisar papeles aunque a nosotros nos sigue pareciendo oportuno. Aquí nos pidieron todos los papeles y quedamos registrados en la Hacienda pública griega.
- Hay supermercados (un Lidl en la zona nueva y un pequeño Carrefour junto al amarre) donde es fácil encontrar de todo
- Hay una tienda de buceo en la que conseguimos llenar los tanques de campingaz (hay que dejarlos ya que los envían a rellenar)
- Es ideal para salir a comer, cenar, tomar copas, hay buenos helados...


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miércoles, 13 de enero de 2010

ATRAPADOS!



Ya estoy de nuevo en Grecia. El equipo vuelve a estar unido y presto para recorrer el Egeo... si los planeta se alinean correctamente y las circunstancias nos lo permiten.

Llegué a Atenas con una puntualidad más que británica (claro que tiene un poco de trampa, según el billete de avión el vuelo tarda tres horas y cuando embarcas el comandante te dice que la duración es de 2h 20 min... así cualquiera es puntual!) y allí estaba Johan esperándome.

Me recibió un día lluvioso a pesar de que el capi presumía de solecillo estos días atrás -será que me he traído el mal tiempo- aunque en el cielo se dibujó un presioso arco iris para darme la bienvenida.



Y ya en la marina seca me esperaba LA NOTICIA. La salida del travelif hasta el agua está completamente bloqueada por barcos de pesca que están haciendo su puesta a punto anual.




Para confirmarlo fuimos a las oficinas y sí, hasta final de mes no podemos volver al agua!
A causa del tiempo -en este caso del BUEN tiempo- los barcos han faenado hasta más tarde que otros años y han salido del agua después que otros años. Si a eso le sumamos que es poco habitual que un velero quiera volver al agua en enero... pues eso!



Eso sí, la marina se hace cargo de los gastos de los días "extras" que nos toca estar en tierra...

O sea, que en los próximos días, este va a ser el paisaje que veremos desde la bañera



No es una romántica puesta de sol... pero tan poco está tan mal



En la marina somos un total de unos 5 barcos trabajando a bordo -o sea, que no estamos solitos- y trabajo no nos falta.
Estábamos deseando llegar al agua y desplegar las velas y tendremos que esperar aún unos días, pero cosas peores podrían haber pasado ¿verdad?



PD. La calefacción funciona fenomenal!


sábado, 9 de enero de 2010

Vuelta al agua!

Hola a todos

hoy sólo quiero dejar una pequeña nota para deciros que si no hemos escrito ninguna entrada en estos días es porque el ordenador con las fotos está en Grecia y yo sigo en Barcelona.




Pero mañana ya dormiré de nuevo en el Alea y el blog volverá a activarse.
Y lo más importante: en una semanita esperamos volver a estar en el agua, navegando como nos gusta y compartiendo noticias frecas!





Así que me voy volando -nunca mejor dicho- para seguir nuestra ruta junto a todos vosotros: nuestros polizones favoritos.