Yo, después de haber pasado más de dos años en Grecia sin visitar el Parthenon, después de haber necesitado un año en Panamá para conocer el canal, ya estaba más que resignada a no pisar el centro histórico de Cartagena (no me quejo, me encanta trabajar en el velero y no hay mayor satisfacción que ver cómo mejora y luce bonito) pero... tuvimos un día de verdaderos turistas.
La festividad del 12 de octubre aquí se pasó al lunes porque caía en sábado. Ya teníamos el travelif concertado para la mañana del martes, no había ni una tienda en la que pudiéramos comprar material abierta, hacía sol por primera vez desde que pisamos Colombia... ¡sólo podíamos ser turistas!
Nos plantamos en la plaza de la Torre del Reloj y a partir de ahí nos dejamos llevar por la gente, por la intuición -esta calle o aquella-, por el gusto de andar sin prisa y con la sorpresa en la mirada de descubrir que cosas TAN BONITAS puedan estar ahí, al alcance de la mano.
En fin, que poco hay que decir... sólo unas imágenes que compartir.
Si todavía no estaba en vuestra
lista de posibles destinos...
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