Pero
cuando los sueños se cumplen, la vida sigue imparable y no queda más
que buscar nuevas metas!!! La nuestra ahora es trazar la ruta para la
nueva temporada del Alea, pero de eso hablamos más tarde, porque
todavía queda mucho Beagle por compartir.
Después
de los dos días estupendo en Seno Pía, decidimos seguir haciendo
rumbo oeste y llegar hasta caleta Julia que en nuestro descenso en
invierno estaba también inaccesible por el hielo.
Caleta
Julia se encuentra en un fiordo, en el lado sur del brazo noroeste,
que ofrece tres diferentes fondeos. Los amigos del Galactic habían
pasado unos días en Julia, decían que había buenas caminatas. El
último de los tres -caleta Cinco Estrellas- es uno de los preferidos
de la mayoría de los veleros con quienes habíamos hablado... pero
tiene poco calado, la entrada no es la más fácil, hay que atar con
cabos a proa y popa porque no hay espacio ni para el ancla. A mi
-desde luego- me daba miedo. A Johan -por supuesto- no. Pasamos de
largo caleta Julia y pusimos proa a Cinco Estrellas.
Ya
llegando al fondeo vimos aparecer un mástil, puff, ya había un
velero (según las guías, bien organizados caben dos o tres) así
que nos acercamos cautelosos y echando mano del megáfono que tenemos
en el palo (no contestaban en la radio) nos comunicamos con la
tripulación del Suditude y pedimos permiso para abarloarnos.
Nos
dieron su aprobación y empezamos la maniobra. En un ratito estábamos
bien atados al vecino y con cuatro cabos a tierra... parecíamos dos
moscas en una tela de araña.
Buenas relaciones de vecindad, ataditos por todos los lados, esta vez sin ancla |
Antes
de tener tiempo de decir ¡todo listo! Francoise tenía cuatro tazas
de café listas para nosotros!!!
El
lugar es espectacular, se pueden hacer unas bonitas caminatas montaña
arriba, rodeados de cascadas, ríos...
El día
estaba algo lluvioso y por los partes de meteo que teníamos, muy
ventoso en el canal aunque en el fondeo no se notaba en absoluto.
Aprovechamos
para caminar y disfrutar de esas pequeñas maravillas que se esconden
en muchos rincones si sabes mirar bien
Por fin un martín pescador que nos sale bien enfocado!! |
Dos veces en la misma caleta!! |
Pero
-en mi opinión- lo mejor de lo mejor, las vistas de los dos veleros
en ese huequito inventado por el fiordo. Sí, sin discusión, a pesar
de mis miedos un lugar Cinco Estrellas. Gracias de nuevo Johan por no
hacerme más caso del necesario
Pequeños como garbancitos en medio de tanta grandeza. Protegidos como en el mejor de los escondites |
sin comentarios, no me perdonaría habérmelo perdido. |
Como
os podéis imaginar yo, otra vez, me divertí como una niña. Será
la actitud, será el lugar, será la compañía, será...
Buscando florecillas en el bosque |
Desde
luego nos esperaba un nuevo paseo frente a los glaciares
Sí,
el Beagle no solo nos está regalando las más bellas de las
imágenes, también nos está dejando encima unos kilos de más.
¿quién dijo que a bordo solo se puede comer algo sencillo? empanada de espicanas hecha "en ruta", grande, eso sí. |
El camino todavía nos tenía preparada otra sorpresa, habíamos navegado un buen rato acompañados de delfines, pero en un momento dado Johan gritó “ballenas!”.
A lo
lejos se veían claramente los chorros de agua característicos de
estos cetáceos. Era un grupo de tres que iban nadando hacia
nosotros.
Un
rato después vimos las señales de otro grupo, guau!!!, genial.
Pudimos
verlas bien cerquita y hasta hacer una foto aceptable. Aquí os la
dejamos por si algún experto nos puede confirmar de qué tipo de
ballena (o familiar) se trata:
siempre una sorpresa, una grata sorpresa! |
Y con
tiempo suficiente para visitar de nuevo Isla Redonda
donde
volvimos a caminar por sus senderos y donde -es que no tenemos
perdón- nos regalamos otro de esos asaditos a los que tanto nos
estamos acostumbrando!!!
Y
entre esto y aquello se nos escapó diciembre y el año de las
manos!!
El mes
de enero también ha tenido sus aventuras -las dejamos para la
próxima entrada- pero nos ha tenido bastante ocupados trazando la
ruta para los próximos meses.
El
destino final (a largo plazo) lo teníamos claro: nos vamos a
Groenlandia, despacito como siempre
El
camino para llegar ha sido lo que nos ha tenido pensando, pensando.
Tal vez la ruta de navegación más rápida y sencilla era remontar
los canales y desde Pto Montt subir llevados por la corriente de
Humboldt y los vientos portantes hasta Panamá. La ruta más
novedosa, subir por la costa Atlántica del cono sur y así descubrir
nuevos países pero sobre todo encontrarnos con buenos amigos que nos
esperan en tierras argentinas y -por qué no- para circunvalar América del Sur (Tobago-Tobago) que nos parece divertido.
Al
final se impuso la aventura, la amistad... quien sabe, pero el 15 de
marzo partimos hacia Buenos Aires y buscamos compañía!!! Pincha
aquí para mas info.
Hasta
ahí nos queda algún paseo por el Beagle y sobre todo Cabo de
Hornos... esto del sur todavía no se ha terminado!!!!!!!!!!!
1 comentario:
Hola Silvia:
Dificil saberlo con una sola foto, pero podría ser una Minke (O rorcual aliblanco) Balaenoptera acurostrata por la altura de la aleta dorsal.
Característico que no es de las mas grandes y las aletas pectorales de mediano tamaño y blancas en el medio...
¡Quien pudiese estar ahí!!!
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